Mi experiencia con Gemma ha hecho que ir al psicólogo sea una de las mejores decisiones que he tomado. Llegué perdida, algo desorientada en muchos ámbitos de mi vida profesional, amorosa, conmigo misma... Tenía pensamientos y sentimientos que no sabía gestionar, me hacía daño constantemente y era un bucle del que no sabía salir.
Pensaba que me daría la respuesta a todas mis preguntas, solucionaría todos mis problemas... pero hizo algo mejor, me enseñó a escucharme, a saber qué quería, a identificar lo que sentía o qué me apetecía hacer de verdad. Gracias a eso he podido conocerme y me siento más segura, confío en mí, me doy el valor que nunca supe darme y encontré ese espacio seguro conmigo misma.
Todo esto me ha costado y me sigue costando, son cosas en las que sigo trabajando, ya que también te das cuenta que necesitas tiempo y paciencia, aceptar lo que sientes para seguir mejorando. Ahora, aunque algunos hábitos o pensamientos dañinos aparecen, no los tengo miedo, no los evito y consigo solucionarlos. 
Esto que he aprendido y sentido no lo podría haber conseguido sin Gemma, parece algo obvio, pero no todos en esta profesión saben escucharte, empatizar y conectar contigo hasta el punto de cambiarte la perspectiva en muchas cosas ya interiorizadas que creías imposibles de cambiar o que no dabas importancia y no te dabas cuenta de lo que realmente te podía hacer daño. Ella ha conseguido todo eso y más conmigo.
Estoy muy agradecida y recomiendo sus sesiones 100%